¡Ya llegó el viajero! Cuenca vive su gran pase este 24 de diciembre

(Cuenca, Azuay. 11-12-2018).- El Pase del Niño Viajero de Cuenca, es una de las actividades del turismo religioso más importantes del Ecuador. Cada 24 de diciembre, cerca de 500 mil personas se movilizan por la calle Bolívar para festejar la navidad, danzando, cantando, bailando y regalando pan de pascua con chicha de jora a los miles de asistentes para homenajear al Niño Viajero, el rey absoluto de la gran celebración, conocida como el “Quinto río de Cuenca”.

El festejo al “Niño Viajero” inicia a la 09H00 con la misa campal en la Iglesia del Carmen de la Asunción. Luego los priostes y religiosos trasladarán la imagen hacia la iglesia Corazón de Jesús, donde se lo colocará en un elegante altar por tres horas, para la adoración y visita de sus fieles. A las 11H00 empieza la gran pasada por la calle Bolívar.

El Pase parte con el desfile del ángel de la estrella, que anuncia la llegada del Niño Jesús. Este párrafo bíblico será escenificado por jóvenes religiosos de la ciudad. Luego estudiantes de las escuelas, colegios y universidades de Cuenca y Azuay, personificarán escenas bíblicas como la anunciación, visita de la Virgen María a su prima Isabel, huida, censo y nacimiento en Egipto, visita de los Reyes Magos, cantos y alabanzas de los pastores. Todo el espectáculo va montado en gigantes carros alegóricos que llenan de colorido y alegría la calle Bolívar.

El Pase del Niño Viajero de Cuenca, es una de las actividades del turismo religioso más importantes del Ecuador. Cada 24 de diciembre, cerca de 500 mil personas se movilizan por la calle Bolívar para festejar la navidad y al Niño Viajero,

Al gran Pase se suman las familias cuencanas y azuayas quienes preparan para esta fecha sus mejores galas para caminar y saludar al “niñito viajero”. La mayoría desfilan personificando a la gran familia.

El baile del tucumán y las danzas acompañadas de las famosas bandas de pueblo, animan a los viajeros, turistas y ciudadanos en general, que permanecen hipnotizados por la alegre presencia de los grupos, que al mismo tiempo reparten a todos, caramelos, pan de pascua y chicha.

El Pase transita por toda la calle Bolívar, sitio en el que los viajeros rinden homenaje a la imagen con ofrendas, rezos y agradecimientos. El Niño concluye su pasada en la Plaza de las Flores con la celebración de la Misa del Gallo a la que acuden miles de personas.

Los mejores sitios para tomar fotografías, grabar videos y observar el gran Pase del Niño Viajero y compartirlo con el mundo a través de las redes sociales, son los balcones de las casas patrimoniales de la Calle Bolívar. Cada 24 de diciembre sus propietarios permiten el ingreso de quienes anhelan observar la corriente del Pase del Niño denominado el “Quito río de Cuenca”, por la multitudinaria presencia de asistentes.

¡Lo que debes saber!

El pase (también denominado pasada) que se realiza cada 24 de diciembre se celebra en honor a una imagen que fue enviada a tallar en 1823 por Josefa Heredia y perteneció a la familia Cordero. Uno de sus descendientes, monseñor Miguel Cordero Crespo, llevó de viaje al Niño para visitar, entre otros lugares, Roma y Tierra Santa para colocarlo en el lugar donde nació Jesús y bautizarlo en el río Jordán. Cuando Cordero regresó, en el año 1961, fue recibido por Rosa Palomeque, amiga del sacerdote, quien dijo al ver la imagen: «¡Ya llegó el viajero!». Desde ahí se lo conoce como Niño Viajero. Ese mismo año se celebró su primer pase y fue creciendo hasta convertirse en la Gran Pasada.

La primera mantenedora del Pase del Niño Viajero fue Rosa Palomeque, quien luego encargó esa función a su hija Rosa Pulla. Al fallecer, en el año 2007, se hizo cargo su hija, Carmela Llivipuma, quien actualmente prepara grandes cantidades de pan y chicha para regalar a los participantes de la pasada.