Refugio Ecológico Molinuco – Unidad Educativa Juan de Salinas

Molinuco es un lugar lleno de biodiversidad. Desde el momento en que llegas a la vieja casona de hacienda puedes contemplar diversos atractivos que hacen especial a este lugar. Uno de ellos es caminar por los senderos ecológicos diseñados y señalizados para que los visitantes no se pierdan y disfruten con toda seguridad del sitio y contemplen en todo su esplendor a la naturaleza viva.

A lo largo de estos caminos nacen vertientes naturales cuyas límpidas y cristalinas aguas desembocan en el Río Pita, dando lugar a la formación de este estruendoso río con cascadas que reflejan el sol radiante en un claro día de verano. Disfrutar de estas aguas, revitalizan al visitante, pues existen pequeñas piscinas naturales con puentes colgantes que permiten a grandes y pequeños refrescarse en áreas bautizadas con los nombres de Vado del Pescador, un apacible lugar para pegarse un chapuzón. También puede hacerlo en el Molinuco. Luego de disfrutar del agua o de tomar fotos del bello paisaje, llegar a una zona rocosa con una caída de agua, conocida como El Manantial.

Siguiendo por el mismo sendero río abajo, te encuentras con la “Gran Cascada Kimsa”, otro de los atractivos para los más audaces, ya que se tiene que bajar varios escalones para llegar a su desembocadura y poder sentir el vibrante torrente del choque del agua con las rocas.

En este lugar usted podrá respirar un aire puro gracias a los frondosos árboles y a sus dos tipos de bosque que cubren las más de 60 hectáreas del Refugio, el primero es un bosque primario o virgen en donde habitan especies como la achupalla, el huaicundo, el pumamaqui, la chuca, los alisos, la mora, el mortiño, las bromelias y las orquídeas. Y en el bosque secundario, predominan los árboles de eucalipto, ciprés y pino.

Es hora de regresar a la casona y para los viajeros más aventureros, la caminata hacia el Mirador de los Volcanes, ubicado a 3.780 metros sobre el nivel del mar, les permite admirar la majestuosidad de nevados y montañas como el Cotopaxi, el Sincholagua, el Antisana, el Cayambe, el Ilaló, el Pichincha, el Corazón, el Pasochoa y parte de los Iliniza.

Para los jóvenes y pequeños existen en el refugio, juegos recreativos, canchas deportivas, cabalgatas, pesca deportiva, granja ecológica (isla de conejos), canoping y servicio de restaurant.

Si su deseo es quedarse acampar, este lugar cuenta con lugares específicos y seguros para que rodeado de sus amigos y/o familiares puedan compartir entre risas todas las aventuras realizadas en el día en este majestuoso lugar.
Los parajes de Molinuco son mágicos e inolvidables con rincones únicos y privilegiados que hacen que el visitante quede encantado y desee regresar una vez más.

 

Autor: Unidad Educativa Juan de Salinas