La Gran Cascada del Río Pita – Unidad Educativa Fiscal Oswaldo Guayasamín

Ubicada a 15 kilómetros de Sangolquí, cabecera cantonal de Rumiñahui. Es un lugar admirable, para empezar esta aventura se debe dirigir desde Selva Alegre por un camino empedrado hasta Loreto, donde se puede alquilar camionetas que le llevarán por un camino vigilado por centenarios árboles de eucalipto a cada lado, al fondo se puede divisar una inmensa alfombra verde de pastizales de haciendas propias del lugar, mientras se va adentrando se observa desde lo alto las copas de los grandes bosques.

Luego de 25 minutos se arriba al ingreso de la Gran Cascada, el olor profundo a eucalipto llena los pulmones de un aire sin contaminación, para los amantes de la caminata existen varios senderos los que le llevarán por diversos parajes, entre los cuales se podrán observar golondrinas, colibríes, pavas de monte entre otras aves. El  río Pita siempre va junto al caminante, al seguir cada sendero le llevará a diferentes cascadas, pero si es atrevido puede realizar una caminata de unos 80 minutos por el interior de un cañón rocoso, escuchar el trinar de las aves y observar diversidad de flora le llena de regocijo.

Tras un pequeño esfuerzo se abrirá ante sus ojos una cascada imponente que deslumbra al visitante; su fuerza es incomparable puede acercarse a ella tanto que su manto blanco de aproximadamente 60 metros de altura, le cobijará con una brisa reconfortante. En éste lugar solo se escucha el golpear del agua en el fondo como un rugido.

Al pie de la cascada el turista se sentirá tan insignificante; primero por la fuerza que se produce por la caída vertiginosa del agua desde lo alto, y luego porque se encontrará dentro un gran acantilado rocoso, sólo en ese momento el ser humano se dará cuenta de la hermosura y el poder de la naturaleza.

Aquí el turista puede hacer un descanso y si prefiere existe un lugar adecuado para acampar; será una experiencia única el mirar las estrellas; y si tiene suerte en noches de luna llena será testigo del vuelo de murciélagos que habitan en el lugar.  Cuentan los lugareños que en este sitio se conectan las personas con la naturaleza para hacer una renovación espiritual.

El acceso a éste sitio no es complicado, por tal razón pueden concurrir personas de todas las edades; debe llevar ropa adecuada, botas de caucho, repelente de insectos, protector solar y abundante agua para hidratarse. Si la idea es acampar deberá llevar ropa abrigada, sin duda será una aventura irrepetible.

 

Autor: Unidad Educativa Fiscal Oswaldo Guayasamín