(Quito, Pichincha. 05.06.2019) .- Los bosques tropicales de Ecuador  se han convertido en el hábitat ideal de diminutas especies de aves: los colibríes. El país, pese a ser uno de los más pequeños de América Latina, alberga en su territorio casi la mitad de estas especies registradas a nivel mundial.

La privilegiada ubicación sobre la línea equinoccial y la cantidad de luz que reciben sus bosques tropicales, han creado cadenas alimenticias atrayentes para cerca de 150 especies de colibríes que vuelan bajo los cielos ecuatorianos.

Estas aves, catalogadas como las más pequeñas del mundo, se las encuentra desde el nivel del mar hasta los 4.800 msnm. Además del maravilloso color de su plumaje, los colibríes se  caracterizan por tener la habilidad de mantenerse en el aire y volar hacia atrás.

Ecuador alberga distintas especies de colibríes endémicas como el Zamarrito Pechinegro y el Zamarrito Gorjiturquesa. Además, en 2017, al sur del país, entre las provincias de El Oro y Loja, se descubrió la especie Oreotrochilus cyanolaemus, mejor conocida como “estrella de garganta azul”.

Juan Manuel Carrión, miembro de la Fundación Zoológica de Quito y del colectivo Aves Quito explica que la expansión de tipos de colibríes en el país puede responder a “un hecho evolutivo aprovechado” por estas aves, la nula presencia de insectos polinizadores en las grandes flores de las montañas ha hecho que estas aves encuentren en estos lugares, “nichos” de alimentación.

La diversidad única de flora y fauna que habita dentro del país de los “cuatro mundos”,  lo han  convertido en el destino perfecto para el estudio y avistamiento de aves. Ornitólogos y aficionados del mundo entero, se adentran en los bosques tropicales para presenciar de cerca el vuelo de especies mágicas.

¡Ecuador, destino Verde Líder del mundo!