Cerro Sagrado Amina (King Kong) – Unidad Educativa Comunitaria Intercultural Bilingüe Jatari Unancha

Antes de llegar a Zumbahua una parroquia rural del cantón Pujilí perteneciente a la provincia de Cotopaxi en esos páramos, entre Pujilí y Quilotoa, se extiende el territorio de la actual Tigua, en el que se integran los cabildos de Huayrapungo, Casa Quemada, Ugshaloma Grande, Ugshaloma Chico, Calerapamba, Pactapungo, Yanakachi, Calicanto, Tigua-Chimbacuchu (O Guana-Toropata), Tigua-Centro, Tigua-Rumichaca, Tigua-Yahuartoa, Sanisami, Niño loma, Yatapungo, Chami y Quiloa, además de las haciendas de Tigua y Rumichaca.

 

Es una región fría y de paisaje adusto; tierra de profundos valles y escarpadas laderas; de suelos pobres, muy erosionados y con una excesiva concentración de arena, de los que arranca su exiguo sustento ese buen número de comunidades indígenas dedicadas a la agricultura y el pastoreo. Lo más hondo de la depresión, es un desierto de yeso y escasas malas yerbas. Las elevaciones medias-bajas, en cambio, nos ofrecen un hermoso paisaje de sembrados, de multicolores campos de cebada, habas y chochos; de papas, mellocos, oca y mashua. Hacia arriba, otra vez retrocede la vegetación, pero ahora por efecto de la altura, y los cerros se visten apenas de rala tundra andina, acre manjar diario de la oveja y el llamingo.

Los vientos soplan fuerte y las lluvias son a menudo torrenciales, es una tierra recia; un solar de vida dura y austera; yermo pajonal cuyo mejor fruto ha sido el del arte, el de la joven tradición pictórica que nacida entre estas gentes, constituye uno de los grandes motores de la cultura visual en el Ecuador contemporáneo.

Desde la orilla de la carretera de primer orden que comprende la vía Latacunga–La Maná se visualizan pequeñas casas de adobe y teja, pintadas de colores sobrios, que guardan en sus entrañas las pinturas que retratan la ingenuidad plástica de los Andes septentrionales. Estas rústicas casitas se hallan camufladas entre montañas amarillas cobijadas por el azul de los cielos, pintadas por espesa neblina, cuyas temperaturas pueden descender hasta los 05 grados centígrados.

En la comunidad de Tigua existen diferentes montañas y cerros, el protagonista de esta travesía es el majestuoso  cerro Amina un lugar único, mágico, encantado y adecuado para realizar largas y estupendas caminatas.

El cerro ha estado, está y estará siempre ahí. Imponente, llamativo, hermoso y lleno de vida; invitando y permitiendo que camines desde su falda hasta la cima, acariciándola con tus pasos suaves que van sintiendo los pajonales existentes.

A este cerro también se la conoce como el mono, debido a que tiene la forma del reconocido personaje de la película King Kong, que se lo puede observar de diferentes lugares.

Cuando se empieza la caminata se puede ir observando diferentes plantas existentes en el sector como la chuquiragua, espesos pajonales, chilcas y musgos principales productores de almacenamiento de agua, también existe animales nativos del sector como conejos, ovejas y llamas. Al llegar a la cima se logra ver todas las comunidades y varias montañas rodeadas de pajonales que se mueven con la fuerza del viento que sopla. Mientras se va ascendiendo a la cima se puede ver los rostros de personas que presenta en la parte delantera del cerro.

Las personas del sector caminan hasta la cima del cerro para realizar rituales con shamanes,  ofrecen una misa en épocas de verano para que caiga la lluvia y mejore los cultivos de los diferentes productos que siembran.

Existen leyendas que relatan las personas sobre la montaña como que en su interior hay una olla de oro del mismo modo antiguamente se dice que el cerro era un hombre con poncho rojo y calzón blanco sombrero y botas negras, además era bien dormilón, se dice que había una repartición de plantas entre cerros pero este cerro era bien dormilón y se quedó sin su parte.

Para poder llegar al sector la travesía empieza desde el terminal terrestre de la ciudad de Latacunga, la cooperativa de transportes Vivero es el medio por el cual nos permite llegar al lugar mencionado, el tiempo que se tarda en llegar es de 45 minutos, la parada del destino es en el km 44 en la comunidad Tigua Calera Pamba.

El majestuoso e imponente cerro Amina un lugar que está listo para recibir a turistas nacionales y extranjeros  que disfrutan y les gusta conocer las maravillas que existen escondidas en el páramo Andino.

Autor: Unidad Educativa Comunitaria Intercultural Bilingüe Jatari Unancha